Colorear es una de las actividades que más disfrutan los niños y las niñas desde temprana edad. Es, por cierto, un excelente ejercicio para sus dedos, muñeca y brazo para el desarrollo de la motricidad fina, necesario para la escritura. Cuando sus hijos dibujen o coloreen, verifiquen que apoyen el codo sobre la mesa para tener un mejor control de sus trazos. También, ayúdenlos a tomar el crayón entre el dedo índice y pulgar para formar un buen hábito para tomar posteriormente el lápiz para escribir. Niños y niñas desde los dos años pueden empezar a aprender a tomar el crayón correctamente. Prefieran los crayones de cera porque con ellos no necesitan hacer tanta fuerza sobre el papel para obtener color. También pueden utilizar marcadores de agua.
Edades: 2 a 6 años
¿Qué se necesita?
Hoja de papel 120 grs. del tamaño que deseen
Crayones o marcadores
¿Qué se hace?
Esta actividad se trata de dibujar patrones en una hoja y después rellenar los espacios en blanco. Pueden hacer:
círculos concéntricos (uno dentro de otro) del más grande al más pequeño
cualquier diseño concéntrico con otras figuras geométricas
diseños con las letras del alfabeto ¿Cómo queda una hoja llena de “e”, todas pegaditas unas con otras, por ejemplo?
A la vez que disfrutarán rellenando su hoja, también desarrollarán las siguientes destrezas:
Motricidad fina Como se dijo anteriormente colorear es una manera muy divertida de “aflojar” la mano en preparación para la escritura.
Coordinación óculo-manual Si pudieran regresar a la edad de sus hijos se darían cuenta lo difícil que es hacer un trazo justo allí donde se quiere. Esto, que para un adulto es tan sencillo, en el niño y la niña de preescolar demanda un alto nivel de desarrollo neurológico para el control y coordinación de sus movimientos. La práctica hace al maestro. Ayúdenlos dándoles una guía de donde deben iniciar y finalizar los trazos, pero no sean muy exigentes pues podrían desmotivarlos.
Vocabulario Pueden repasar nombres de colores, figuras geométricas, trazos de líneas (rectas, curvas, diagonales, etc.). Si trabajan con las letras, pueden mencionar los nombres, pero si no lo hacen, quizás sea mejor. No es una tarea para aprenderse nombres de letras, pero sí pueden hacer mención de las curvas y las rectas y la direccion hacia donde se hacen los trazos.
También pueden invitar a sus hijos a hacer diseños monocromáticos o policromáticos. No tengan miedo de decirles estas palabras, las aprenderán con tanta naturalidad como aprendieron mesa y silla. Expliquen lo que significa cada uno. También pueden trabajar sólo con colores primarios o secundarios.
Habilidad lógico-matemática Pueden contar cuántas líneas rectas o curvas han dibujado, cuántos colores pueden combinar, cuántas figuras caben en la hoja, etc. También pueden crear patrones o secuencias de figuras o colores, haciendo líneas rectas y curvas en cantidades específicas, o coloreando con determinados con colores en una secuencia establecida.
Creatividad ¿Qué se forma cuando se combinan determinados trazos? ¡Sorpréndanse de lo que se forma cuando hacen una “X” grande en toda la hoja!
Armonia y combinación de colores ¿Qué colores combinan mejor? ¿Cuáles se ven mejores juntos?
Concentración y atención Concentrarse en una actividad es algo que se aprende a través de la práctica constante. Niños y niñas necesitan desarrollar la capacidad de concentrarse por períodos hasta de una hora en una misma actividad. Esto se consigue gradualmente al propio ritmo del niño o de la niña. Sin forzarle, sino motivándole a que mantenga el interés. Esta actividad requiere de toda la concentración para colorear donde se desea y mantener el patrón que se ha elegido.